Ecologia
En un bosque frondoso la temperatura es sobre unos 5 o 6 grados menor que en una superficie yerma, mitigando los efectos del cambio climático. Además se protegen los suelos de la erosión, siendo este punto también de vital importancia, pues cada año se pierden toneladas de tierra fértil debido a la tala indiscriminada, la cual a su vez provoca la desertificación. Los arboles absorben los gases contaminantes del aire, producen oxígeno y aumentan la biodiversidad. La reforestación tiene que suceder con variedades autoctonos, adaptados a nuestra zona climática.